(Montel) Los países de la UE deberían prolongar sus esfuerzos para reducir la demanda de gas en un 15% durante otros seis meses para cumplir con los objetivos de almacenamiento para el próximo invierno, dijo el centro de estudios Bruegel en un nuevo informe publicado el jueves.
Una ampliación hasta octubre sería el mínimo requerido para que el bloque cumpla su objetivo de llenado de las instalaciones de almacenamiento de gas al 90% de su capacidad para entonces, incluso con unas llegadas sostenidas de GNL y un fuerte suministro por gasoductos no rusos, dijo.
Las naciones de la UE acordaron voluntariamente reducir su consumo de gas en un 15% frente al promedio de los cinco años anteriores desde el 1 de agosto del año pasado, en un intento por aumentar los inventarios ante la reducción de los flujos rusos por su guerra contra Ucrania. Sin embargo, esta obligación finalizaría el 31 de marzo.
“En la cuerda floja”
Incluso si se acordara una ampliación, "el equilibrio entre la oferta y la demanda de gas de Europa seguirá estando en la cuerda floja durante los próximos dos años", dijo el grupo con sede en Bruselas.
Si las exportaciones de gas ruso a Europa a través de Ucrania y Turquía mantienen los niveles actuales y las condiciones meteorológicas son "típicas" para la época del año, la demanda debería reducirse en un 13% hasta principios de octubre para garantizar la seguridad del suministro, agregó.
Sin embargo, en el caso de que se interrumpieran los flujos de tránsito de Ucrania, se requeriría un recorte del 17%, mientras que si hubiera una parada total de los suministros rusos, incluso a través de Turquía, la demanda tendría que reducirse en un 20% aproximadamente.
Mientras, unas temperaturas más frías de lo normal podrían requerir recortes en la demanda de entre el 20%-26%, según la gravedad, para cumplir con los objetivos de almacenamiento, según el informe.
“Por lo tanto, el retorno de la producción nuclear francesa será muy positivo”, agregó Bruegel, ya que “apenas se ahorró gas en el sector eléctrico el año pasado” debido a los niveles históricamente bajos de la generación nuclear e hidroeléctrica del país.
Solo alrededor de la mitad de la capacidad nuclear de Francia estuvo disponible el año pasado debido a las paradas por mantenimiento ampliadas, aunque desde entonces los niveles han mejorado y solo 12 de los 56 reactores se encuentran actualmente parados.
Cuestión del GNL
Mientras, para mantener un récord de importaciones de GNL, Europa tendría que seguir ofreciendo un precio superior a otros mercados, según el informe, ya que los suministros en diciembre alcanzaron un máximo y el volumen de enero fue el segundo más alto.
“La UE pudo importar tanto GNL porque estaba dispuesta a pagar precios altos.”
“Que Europa pueda seguir contando con estos volúmenes depende de la capacidad de sustitución de combustible de China y de su crecimiento económico”, dijo Bruegel.
Las naciones de la UE acordaron voluntariamente reducir su consumo de gas en un 15% frente al promedio de los cinco años anteriores desde el 1 de agosto del año pasado, en un intento por aumentar los inventarios ante la reducción de los flujos rusos por su guerra contra Ucrania. Sin embargo, esta obligación finalizaría el 31 de marzo.
“En la cuerda floja”
Incluso si se acordara una ampliación, "el equilibrio entre la oferta y la demanda de gas de Europa seguirá estando en la cuerda floja durante los próximos dos años", dijo el grupo con sede en Bruselas.
Si las exportaciones de gas ruso a Europa a través de Ucrania y Turquía mantienen los niveles actuales y las condiciones meteorológicas son "típicas" para la época del año, la demanda debería reducirse en un 13% hasta principios de octubre para garantizar la seguridad del suministro, agregó.
Sin embargo, en el caso de que se interrumpieran los flujos de tránsito de Ucrania, se requeriría un recorte del 17%, mientras que si hubiera una parada total de los suministros rusos, incluso a través de Turquía, la demanda tendría que reducirse en un 20% aproximadamente.
Mientras, unas temperaturas más frías de lo normal podrían requerir recortes en la demanda de entre el 20%-26%, según la gravedad, para cumplir con los objetivos de almacenamiento, según el informe.
“Por lo tanto, el retorno de la producción nuclear francesa será muy positivo”, agregó Bruegel, ya que “apenas se ahorró gas en el sector eléctrico el año pasado” debido a los niveles históricamente bajos de la generación nuclear e hidroeléctrica del país.
Solo alrededor de la mitad de la capacidad nuclear de Francia estuvo disponible el año pasado debido a las paradas por mantenimiento ampliadas, aunque desde entonces los niveles han mejorado y solo 12 de los 56 reactores se encuentran actualmente parados.
Cuestión del GNL
Mientras, para mantener un récord de importaciones de GNL, Europa tendría que seguir ofreciendo un precio superior a otros mercados, según el informe, ya que los suministros en diciembre alcanzaron un máximo y el volumen de enero fue el segundo más alto.
“La UE pudo importar tanto GNL porque estaba dispuesta a pagar precios altos.”
“Que Europa pueda seguir contando con estos volúmenes depende de la capacidad de sustitución de combustible de China y de su crecimiento económico”, dijo Bruegel.
